sábado, 1 de marzo de 2008

¿Y LAS DEMÁS NIÑAS?



Se busca niña. Se ha perdido, anda por esos mundos guiada por el run-run de un soniquete rancio, antiguo, ultramontano que hiela al más cálido. Jugaba con un montón de nenas y nenes hasta que llegó un señor con barba que se la llevó "al paso alegre de la paz". Se marcharon en taxi porque no el señor no tenía bonobús y se perdieron en un viaje al centro... de la tierra. Enséñale el camino a casa: calle Libertad, barrio del Futuro. La esperamos el día 9 de marzo. Con todas las fuerzas.



La viñeta es de Forges, publicada en El País. Obtenida de www.espaiobertsocialista.wordpress.com


¿Y las demás niñas?


Laura cumplirá mañana seis años. Ha nacido en España y tiene unos padres, madre y padre para ser exactos, con empleo y vivienda (si bien el empleo de su madre no es fijo y la vivienda familiar tiene hipoteca a interés variable). Va a un colegio público y sus padres confían en que la vida le permita alcanzar un nivel razonable de éxito.
Laura habla hasta por los codos y el jueves, mientras cenábamos, me escuchó comentar que no sabía sobre qué escribir hoy. Como un rayo, intervino para decir que si lo hiciera ella pondría que todos los niños son iguales pero que, como todavía no escribe muy bien, mejor que lo escribiera yo ya que no sabía de qué. Además continuó diciendo que daba lo mismo que un niño o una niña tuviera un color de piel u otro porque, como todo el mundo sabe, la carne es de color carne y cada carne tiene el suyo. Y puso ejemplos. Me dijo que mi carne es más morena que la suya y la suya más que la de su hermana pequeña, Andrea, que es clarita y se parece en la piel más a su madre, pero que eso daba igual.
No paró porque Laura es muy locuaz y siguió. Me dijo también que en su cole hay niños que viven con su mamá sólo o con su papá y que hay algunos que viven hasta con su abuela. Y también da lo mismo. Como aquellas muchachas que un día cenaron en casa y que eran novias; cuando se casen y tengan niños, ¿qué más dará?, ¿es que serán distintos? Así que terminó: “Pon eso: que todos los niños somos iguales”
Siguió cenando su tortilla con normalidad, y quesito fresco, como si no hubiera dicho nada importante. Pero la realidad es que estuvo unos tres minutos hablando, entre los otros novecientos que no calla, con una solvencia propia de su edad pero, por encima de todo, propia de la verdad. Sorprende a este bobo, con la baba caída, que las cosas trascendentes tengan una solución tan fácil, vista a vuelo de niña. Cuando media España se regocija en el cuento del debate entre los principales candidatos, el de esa niña nacida en España y bla bla, otra niña (cuya mayor inquietud, afortunadamente, será a qué jugar con su hermana mañana) desbarató en tres minutos también, en un ambiente más privado pero infinitamente más mágico, ese discurso irreal.
Si me faltaba alguna, Laura me dio la última razón. No se trata de lo que dijo el señor del cuento sino de lo que no dijo: de todos a los que dejó fuera porque no caben en su visión estrecha. También son. Y deben estar. Votaré el día 9 para que quepan todas las niñas.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gusta este artículo. Muchas gracias

Anónimo dijo...

dos horas para acabar con el cuento de PITITA(colegio privado,mechas rubias,amigo BORJA MARI,vacaciones en el yate de papá,pendientes de bola,estoy super contenta)y tre minutos para ver la realidad autentica,afortunadamente hay mas niños como laura y papas como los de laura.enhorabuena el futurao es para niñas como laura.gracias.

Anónimo dijo...

Yo también votaré el día 9 aunque sin mucha convicción, me ha gustado mucho esta entrada, tengo un hijo de 5 añitos,una personita agradablemente alegre y enérgico, digamos que tu entrada me ha hecho enternecer,un saludo amable y nos vemos en las urnas!!Goroka.

RICARDO VERA dijo...

Gracias a tod@s por vuestros comentarios.

Quería hacer una puntualización al artículo. En Diario Córdoba, donde se publica los sábados la columna, hubo un comentario a este artículo que entedió que constestaba a uno anterior de Miguel Aguilar, publicado el viernes 29 en el mismo diario, titulado "Carta abierta a la niña". Bien, no conozco a Miguel Aguilar ni tampoco al autor del comentario pero no contesté con este artículo ni a ese artículo ni a ningún otro. El comentario del Diario Córdoba criticaba el artículo de Aguilar y alababa el mío por ese motivo, contraponiéndolos en la forma. Con indepedencia de la manera en que están escritos cada uno, se parecen y defienden el mismo fondo. Leí el artículo de Aguilar cuando fue publicado y después lo releí en internet, a causa del comentario y me reafirmo en este criterio. Son dos maneras formalmente distintas, con base en mi caso en una experiencia realmente ocurrida, para un mismo objetivo.
Mandé esta apreciación al Diario Córdoba como comentario pero no fue publicado. Quería aclararlo.

Agradezco mucho el comentario de anónimo y de divain.

En cuanto a Goroka, aprecio mucho que vaya a acudir a votar a quien quiera. Espero aportar un gramito de convicción cada vez. Es la pasión la que mueve las cosas y sé por su blog, bilbolunya.blogspot.com, que no anda corta. El día 9 muchos ciudadanos y ciudadanas celebraremos, lo espero con ilusión, la pasión de votar, del ejercicio soberano que nos pertenece, del poder del voto. Alegres y enérgicos, Goroka, como tu nene.
Besos y abrazos a tod@s.

Anónimo dijo...

Felicidades a tu niña Ricardo y vaya pedazo de artículo, tan real como la vida misma y como una niña puede ser capaz de captar tanta inteligencia y lanzar una pregunta al aire tan importante como la de ¿Y las demás niñas que?....
Ahí te mando un enlace de un video divertidisimo sobre el cuento de la niña de Rajoy; este video relata la verdadera historia de la niña de Rajoy, su nombre, y su familia y dedicación.
UN SALUDO DESDE LAS CATALUNYAS.
http://www.elpais.com/videos/espana/Guerra/busca/nina/lleva/bonobus/le/acompana/abuelito/jubilado/Endesa/elpvidnac/20080228elpepunac_8/Ves/

ESPERO LE GUSTEN

Anónimo dijo...

http://www.elpais.com/videos/espana/Guerra/busca/nina/lleva/bonobus/le/acompana/abuelito/jubilado/Endesa/elpvidnac/20080228elpepunac_8/Ves/